La idea de proyecto se basa en generar dos volúmenes de
geometría orgánica en respuesta al emplazamiento, que es un entorno natural, pero
también respondiendo a las preexistencias urbanas fuertes próximas a él (dar
fachada a la calle, dialogar con la masía y respetar estas alineaciones cuando
están en influencia de ellas).
El modo de colocarse en el terreno es flotando encima de él.
De tal modo se pretende ganar vistas a la montaña, crear un clima especial de
lectura y responder a la altura y presencia de la masía. Otra ventaja de
levantarse sobre el terreno es permitir una gran superficie libre donde la
gente puede sentarse, estirarse o jugar.
En estos volúmenes flotantes se coloca el programa de zona
de lectura, PCs, lectura de diario y zona de audición. El resto del programa se
coloca en tres pastillas. Una enganchada a la masía con comunicación directa
con él (Sala de exposición y polivalente), otra paralela a la calle con la
administración, recepción, salas de trabajo, biblioteca infantil e
instalaciones. Y una tercera perpendicular a esta anterior, donde se proyecta
una sala de cine para 100 personas donde se aprovecha el desnivel del terreno
para hacer la grada y crear un volumen integrado en el bosque.
Como la idea de proyecto es generar dos volúmenes que
flotan, el programa en planta baja se abre en fachada sólo hacia la calle y por
el lado que da hacia el bosque se deja una fachada ciega donde se coloca un
talud que sube hasta la cubierta que también está ajardinada unificando la
amplia zona de césped.
El proyecto entiende que en el bosque, a niveles inferiores,
encontramos una gran densidad de arbustos y árboles. Al llegar a la mediateca generamos
un “oasis”, una explanada domesticada con césped donde poder estar y dedicarlo
a la lectura y las relaciones humanas.
Referencias para los volúmenes flotantes.
FabLab House:
Otras referencias:
Detalle de nueva construcción pegado a edificio clásico.
Detalle para túnel de acceso.
